EL DIVIDE Y VENCERÁS NO SE APLICA EN CHIAPAS NOSOTROS YA ESTAMOS DIVIDIDOS.
Pronto tendré 22 años de carrera en el teatro y la actuación, a pesar de sentirme fresco y nuevo en mi labor, al hacer una remembranza, puedo apreciar que la labor ha sido ardua ya que los motivos para renunciar fueron muchos y la desazón aún más grande.
Siempre he pensado que no puedo darme el lujo de renunciar, los diferentes caminos de los ejecutantes del teatro en Chiapas son variados. Algunos han optado por legitimizar su experiencia a través de las diferentes licenciaturas en teatro y actuación que se imparten en el país, incluso hay quienes han cursado maestrías afines con el teatro como Germán Tonatiuh González, alumno del Instituto Universitario Nacional del Arte en Buenos Aires, recientemente una compañera, Jenny González, cursa el Doctorado en Estudios Teatrales en España. Caminos muy loables que parten de un proceso personal y de la necesidad de buscar en el extranjero, lo que en el Estado no existe; licenciaturas, maestrías y doctorados afines al teatro.
Otros caminos son más artesanales, hay quienes hemos optado por capacitarnos en cuanto taller, diplomado, curso, o conferencia, se ha impartido en este pequeño rincón del sureste. Situación que nos ha brindado mayores y mejores herramientas para entrelazar este arte, con otras áreas, música, danza, mucha lectura, estar informado y buscar a través de la experimentación, el ensayo y el error, que funciona o que no funciona dentro de la práctica del teatro.
Este camino autodidacta es criticado por muchos que se autodenominan profesionales, yo escogí deliberadamente la palabra “autodidacta” porque, no soy licenciado en teatro o en actuación pero soy artesano del teatro, creo en la práctica cotidiana, en preguntarme cada día ¿Para qué me levanté hoy? ¿Cuál es mi camino, cuál es mi voz? ¿Qué puedo expresar? Nunca ha sido mi intención ofender a los profesionales del teatro, con título o sin el, me digo autodidacta pero me considero y soy profesional, una profesión es una actividad especializada del trabajo dentro de la sociedad, a quien la ejerce se le llama profesional, desde hace 21 años y un poco mas puedo decir que dedique mi vida a especializarme, e incluso las diferentes actividades que he aprendido han servido para ganarme la vida, primero actor, luego director, después zanquero y malabarista, después dramaturgo, productor, performer. Estas actividades han sido herramientas que han ayudado a que en la escena se desprenda de mí el pájaro azul que llevo en mi cabeza y vuele sin necesidad de abrirle la jaula a pistoletazos.
Otro camino del teatro en Chiapas es la semi independencia que ha logrado “La Puerta Abierta” espacio escénico fundado por Jorge Zárate Godínez, egresado de la Universidad Veracruzana de la Licenciatura en Teatro, en poco más de cinco años han presentado diversas obras, las cuales distan mucho de la “comedia fácil” que nos han vendido las grandes cadenas televisivas así como las producciones teatrales “de fuera”.
En Chiapas tenemos una gran historia teatral, desde el famoso grupo “Debutantes 15” quien vio sus mejores glorias en los años 60´s del siglo pasado y que dio a uno de los mas afamados dramaturgos de Chiapas, quien fuera Carlos Olmos, hasta el teatro hecho por estudiantes de escuelas normales, futuros maestros que se dedican en lo aficionado a investigar el nexo entre la docencia y el arte para su futuro laboral.
Todos estos caminos del teatro en Chiapas tienen algo en común, son llevados a cabo por un líder que no pide ayuda a sus pares, es decir a otros artistas, creadores, investigadores, autodidactas del teatro para solicitar en conjunto apoyos y oportunidades reales de trabajo y de creación, tanto a Gobierno del Estado como a la iniciativa privada.
Solo cuando se lanzan convocatorias a nivel nacional o vienen proyectos específicos para Chiapas los directores dejan a un lado sus diferencias para poder colaborar y vivir esta experiencia, sin darse cuenta que esto mismo puede llevarse a cabo en el Estado aportando la voluntad de trabajar en conjunto, quiero hacer énfasis, que en diversas ocasiones estos directores han colaborado con otros artistas, músicos y técnicos de sonido entre otros, para llevar a cabo sus propios proyectos, pero las carencias del sector en su conjunto es resultado de esta falta de unidad.
La lista de lo que se podría lograr si diez o más creadores en Túxtla o en Chiapas se unieran y solicitaran apoyos al gobierno es innumerable, ¡vaya! Mínimo cinco creadores, que se pongan de acuerdo y realicen propuestas a nivel local y estatal, que exijan que no se cobren los espacios como si fuéramos OCESA o cantantes internacionales, y claro que tenemos capacidad para ser internacionales, varios grupos lo han demostrado, no tenemos mas apoyo porque estamos divididos. Lo más triste del asunto es que el principio básico de “divide y vencerás” ni siquiera tienen que aplicarlo los gobernantes en turno, “ya lo estamos por decisión propia”.
Intentar hacer teatro en Chiapas con el mínimo de recursos y apoyos, aunado al individualismo entre los que nos dedicamos a esta noble rama del arte, y a la falta de cultura en la población de acudir al teatro regional, han hecho de está una labor casi imposible de realizar, por ello, no necesito ir a ningún lado a intentar rescatar algo que nadie le importa, por que ya estoy ahí.
